Cuando solicitamos un préstamo o un crédito a nuestro banco, seguramente el acrónimo CIRBE este presente. Este término hace referencia a la Central de Información de Riesgos del Banco de España, y recoge la información de los préstamos, créditos, avales y garantías que cada entidad mantiene con sus clientes. En Audilex, ampliamos todo el termino a continuación. ¡Sigue leyendo!
La CIRBE es una enorme base de datos que registra los riesgos que las entidades financieras manifiestan acerca de sus clientes. Esta base de datos se actualiza de manera mensual con la información que las propias entidades están obligadas a aportar al Banco de España.
La información de CIRBE es pública, y todas las entidades que concedan préstamos a sus clientes están obligadas a comunicar los riesgos al Banco de España. No obstante, sus datos son confidenciales, lo que significa que no se puede acceder a ellos sin una autorización.
Pero CIRBE también es muy importante para las entidades bancarias. Cuando uno de sus clientes solicita un préstamo o una hipoteca, la entidad acude a la información de CIRBE para comprobar cuál es el riesgo global de impago de dicho cliente. El riesgo de esta persona viene determinado por las deudas que ya tiene contraídas. La CIRBE es, por tanto, una herramienta fundamental para que el banco pueda conocer la capacidad de endeudamiento que tiene una persona.
Es importante dejar claro que la CIRBE no es una lista de morosos, ya que su fin no es recoger los impagos en cuotas de las deudas que tenga cada persona. No obstante, si existe algún dato significativo de morosidad, este queda recogido en la base de datos.