Como es lógico, las auditorías internas son fundamentales para alcanzar los objetivos de tu empresa. Sin duda, se trata de un modo de unificar procesos de diferentes departamentos y ver el árbol desde arriba. Para evitar por ejemplo, conflictos en los objetivos, se realizan este tipo de auditorías y evaluaciones de control. ¿Quieres saber más? En Audilex ahondamos más en el tema. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la auditoría interna?
La auditoría interna es un instrumento de supervisión de la dirección en los niveles de gobernanza, gestión de riesgos y cumplimiento normativo. Se utiliza para supervisar los procesos internos, informar de sus resultados o hacer sugerencias de mejora. Con ello se consigue que la organización funcione de la forma más eficiente y con el menor riesgo posible.
Para ello es clave que los auditores internos sean independientes de los procesos que se desarrollen en la empresa. Tres de los puntos de esta auditoría pasan por:
- La economía, analizando los beneficios esperados, como las posibilidades de ahorro, la prevención de daños, o los riesgos.
- La materialidad/urgencia, priorizando las tareas.
- La diligencia, evaluando los resultados según los objetivos de la empresa.
¿Qué es una evaluación de control?
Por su parte, la evaluación de control implica un proceso de verificación de pasos y resultados que permite medir el progreso o desarrollo del negocio. Todas las compañías están en el deber de analizar, revisar y cuantificar el desempeño y las consecuencias de los diseños de planificación que se llevan a cabo en la empresa.
Si necesitas ayuda con esta serie de procesos, infórmate, nuestros asesores están para ayudarte.
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